Pues sí y no. Sí, porque contiene datos que en la grandísima mayoría de ocasiones son reales. Y no, porque muchas veces omite o da información errónea que puede hacer que nuestra declaración tenga un resultado muy distinto.
OMISIONES.
Sobre todo referido a deducciones tanto autonómicas como estatales. Las más frecuentes, alquiler de vivienda habitual, adquisición de libros de texto y gastos en primas de seguros individuales de salud. Pero también cuotas sindicales y colegios profesionales en rendimientos de trabajo, seguros relacionados con la hipoteca o deducción por maternidad.
ERRORES.
Los de siempre, imputaciones inmobiliarias que no se corresponden a la realidad o circunstancias personales y familiares distintas a las que constan en mi declaración del año anterior, esto es, me he casado, separado o hemos sido padres.
Así que antes de confirmar el borrador ten en cuenta estas circunstancias para, en su caso, proceder a la modificación del mismo.